GRECIA
Grecia a pura implosion...


El Colegio Northwood, búnker de la selección griega en Johannesburgo, viene mostrando imágenes bastante particulares para el mundo en general. De hecho, en su primer entrenamiento en tierras africanas, un religioso de la iglesia ortodoxa (con nueve millones de feligreses en su país) ofreció una corta misa de bienvenida para el plantel en el medio de la cancha…
Las noticias, igualmente, más allá de la bendición divina, no han sido las mejores para los helénicos, tercer rival de Argentina en el Mundial. Primero, Otto Rehhagel, su entrenador, confirmó que Evangelo Moras, defensor, y uno de sus baluartes en el fondo, será baja para el primer partido ante Corea del Sur por no terminar de recuperarse el jugador del Bologna de un problema muscular. Seguramente, será reemplazado por el volante Kostar Katsouranis, quien retrocederá a la zaga. Así y todo, eso no fue lo peor…
En la mañana del martes, un paquete sospechoso generó temor. Debió intervenir entonces una brigada de explosivos. Recién se había terminado el entrenamiento y los griegos, a punto de volver hacia los vestuarios, debieron detener su marcha porque un perro debió detectar si tal paquete tenía explosivos.
Finalmente, la policía lo recuperó sin inconvenientes y, sin revelarse su contenido, se lo entregó a un voluntario de la organización. Y colorín colorado… ¿El cuento griego se habrá terminado?