ALVARADO 1 INDEPENDIENTE 0
Con equipo nuevo,ganò pero sin perder la esencia
Hugo Tenaglia debuto ganando en Alvarado
Hugo Tenaglia debuto ganando en Alvarado
Sorprendió el “Torito” con un muy buen primer tiempo, sobre todo en ofensiva y se fue al descanso arriba en el marcador. Pero en el complemento sacó el pie del acelerador, lo dejó avanzar al rival aunque no lo inquietó demasiado. Hasta que a falta de 20 minutos, el local sufrió la expulsión de Luis Gómez y tuvo que aguantar. Allí apareció la figura de Evangelisti y la solidaridad del resto. Le llenaron el área de centros y a los 49´ le quebraron la resistencia y la alegría. Pero el árbitro, a instancias del línea, anuló el tanto por una supuesta posición adelantada y le permitió el festejo a Alvarado. Sufrido, pero festejo al fin.
El inicio fue parejo, no había progresos en el campo. Hasta que apareció Yoao Asprilla. El colombiano, a los 5´, tras un veloz desborde por derecha tiró un centro muy cerrado que obligó al arquero visitante a despejar al corner. Fue la primera muestra del moreno, que dos minutos más tarde se metió a la hinchada en un bolsillo, cuando encaró por la banda diestra, le metió show (doble “bicicleta”) a la gambeta para desairar a un rival y tirar un buen centro que Minor cabeceó, pero un tanto desviado.
A nivel colectivo, el conjunto de Tenaglia se adueñó de la pelota e intentó jugar con criterio y tuvo buenas variantes ofensivas para quebrar el cero. Buscó por las bandas con Minor, Asprilla e Ischia, y por el centro con Napolitano y Villán. La primera media hora, el protagonista fue claramente el local. En ese lapso, Asprilla tuvo dos opciones claras. A los 17´ se llevó la pelota por delante tras un envío de Minor desde la derecha; y a los 24´ luego de un gran pase de Napolitano, el colombiano encaró en diagonal de derecha al centro, ingresó al área, desparramó a dos rivales con un lindo enganche y definió “tres dedos”, pero el arquero se interpuso entre la pelota y la red de manera brillante.
Luego, hubo unos minutos de desconcierto lógico (por ser el debut) en el fondo de Alvarado y la visita casi logra abrir la cuenta, con una definición de Turri (pase excepcional de Prezioso entre líneas), pero se fue por encima del horizontal.
Y ahí, en el momento que Independiente parecía emparejar la cosa, apareció una gran maniobra de Diego Napolitano. A los 37´ el ex Roca, recibió por derecha en el borde lateral del área, se llevó la pelota hasta el fondo, donde con una gambeta corta se sacó al marcador de encima y puso la pelota en el punto penal para la aparición de Villán, que metió un gran cabezazo y marcó el 1-0.
Sobre el final de esta etapa sólo hubo tiempo para un disparo de Galavert, que obligó la buena intervención de Evangelisti.
El elenco de Tenaglia salió a dormir el partido en el complemento. Alvarado pareció estar más abocado a la recuperación, que a definir el pleito. En ofensiva inquietó apenas con las proyecciones de Castro y la habilidad de Napolitano.
Decididamente, el local reguló, tanto que le permitió a Independiente hacerse de la pelota, animarse y salir a buscar el empate. Pero no encontró los caminos y el “Torito” estaba aplomado, seguro, firme y hasta fue más peligroso en el primer avance claro. Fue sobre los 16´ con un desborde de Asprilla con posterior centro, que Villán dejó pasar para la llegada de un compañero que nunca apareció.
Así, con orden y disciplina en la marca y sin arriesgar demasiado, el triunfo parecía no correr peligro. Pero en el fútbol abundan los imponderables que puede revertir todo en un instante. Y Alvarado es propenso a esas cosas, así lo marca su esencia, su historia. Es que en dos minutos (22 y 24) Luis Gómez recibió dos tarjetas amarillas y por ende, la roja. Restaban 20 minutos en los que había que aguantar a un Independiente que sumó gente en ataque y empezó a llenar el área de Alvarado con centros y pelotazos.
Sin replegarse demasiado, los de Tenaglia se desdoblaron en la marca. El entrenador rearmó la línea de cuatro defensores, sacando a Napolitano y haciendo retroceder hasta el mediocampo a Asprilla, quedando Villán como único punta. Así aguantó, y cuando no pudo, se lució Evangelisti. A los 30´ ante un remate de Prezioso; a los 33´ definió defectuoso Esponda en posición inmejorable; y el arquero local, de manera espectacular desvió un potente disparo de Maxi Villar, a los 34'.
La defensa se cansó de despejar los pelotazos de los tandilenses, que parecían no tener más. Pero sobre los 46´ encontraron el gol en una pelota parada que peinó Lecuona y la colocó al palo opuesto. Un golazo, pero mientras algunos se lamentaban, otros observaron la bandera levantada del juez asistente, marcando una supuesta posición adelantada, que anuló la igualdad y le devolvió el triunfo a Alvarado que, a su manera, con sufrimiento, festejó en el debut.
El inicio fue parejo, no había progresos en el campo. Hasta que apareció Yoao Asprilla. El colombiano, a los 5´, tras un veloz desborde por derecha tiró un centro muy cerrado que obligó al arquero visitante a despejar al corner. Fue la primera muestra del moreno, que dos minutos más tarde se metió a la hinchada en un bolsillo, cuando encaró por la banda diestra, le metió show (doble “bicicleta”) a la gambeta para desairar a un rival y tirar un buen centro que Minor cabeceó, pero un tanto desviado.
A nivel colectivo, el conjunto de Tenaglia se adueñó de la pelota e intentó jugar con criterio y tuvo buenas variantes ofensivas para quebrar el cero. Buscó por las bandas con Minor, Asprilla e Ischia, y por el centro con Napolitano y Villán. La primera media hora, el protagonista fue claramente el local. En ese lapso, Asprilla tuvo dos opciones claras. A los 17´ se llevó la pelota por delante tras un envío de Minor desde la derecha; y a los 24´ luego de un gran pase de Napolitano, el colombiano encaró en diagonal de derecha al centro, ingresó al área, desparramó a dos rivales con un lindo enganche y definió “tres dedos”, pero el arquero se interpuso entre la pelota y la red de manera brillante.
Luego, hubo unos minutos de desconcierto lógico (por ser el debut) en el fondo de Alvarado y la visita casi logra abrir la cuenta, con una definición de Turri (pase excepcional de Prezioso entre líneas), pero se fue por encima del horizontal.
Y ahí, en el momento que Independiente parecía emparejar la cosa, apareció una gran maniobra de Diego Napolitano. A los 37´ el ex Roca, recibió por derecha en el borde lateral del área, se llevó la pelota hasta el fondo, donde con una gambeta corta se sacó al marcador de encima y puso la pelota en el punto penal para la aparición de Villán, que metió un gran cabezazo y marcó el 1-0.
Sobre el final de esta etapa sólo hubo tiempo para un disparo de Galavert, que obligó la buena intervención de Evangelisti.
El elenco de Tenaglia salió a dormir el partido en el complemento. Alvarado pareció estar más abocado a la recuperación, que a definir el pleito. En ofensiva inquietó apenas con las proyecciones de Castro y la habilidad de Napolitano.
Decididamente, el local reguló, tanto que le permitió a Independiente hacerse de la pelota, animarse y salir a buscar el empate. Pero no encontró los caminos y el “Torito” estaba aplomado, seguro, firme y hasta fue más peligroso en el primer avance claro. Fue sobre los 16´ con un desborde de Asprilla con posterior centro, que Villán dejó pasar para la llegada de un compañero que nunca apareció.
Así, con orden y disciplina en la marca y sin arriesgar demasiado, el triunfo parecía no correr peligro. Pero en el fútbol abundan los imponderables que puede revertir todo en un instante. Y Alvarado es propenso a esas cosas, así lo marca su esencia, su historia. Es que en dos minutos (22 y 24) Luis Gómez recibió dos tarjetas amarillas y por ende, la roja. Restaban 20 minutos en los que había que aguantar a un Independiente que sumó gente en ataque y empezó a llenar el área de Alvarado con centros y pelotazos.
Sin replegarse demasiado, los de Tenaglia se desdoblaron en la marca. El entrenador rearmó la línea de cuatro defensores, sacando a Napolitano y haciendo retroceder hasta el mediocampo a Asprilla, quedando Villán como único punta. Así aguantó, y cuando no pudo, se lució Evangelisti. A los 30´ ante un remate de Prezioso; a los 33´ definió defectuoso Esponda en posición inmejorable; y el arquero local, de manera espectacular desvió un potente disparo de Maxi Villar, a los 34'.
La defensa se cansó de despejar los pelotazos de los tandilenses, que parecían no tener más. Pero sobre los 46´ encontraron el gol en una pelota parada que peinó Lecuona y la colocó al palo opuesto. Un golazo, pero mientras algunos se lamentaban, otros observaron la bandera levantada del juez asistente, marcando una supuesta posición adelantada, que anuló la igualdad y le devolvió el triunfo a Alvarado que, a su manera, con sufrimiento, festejó en el debut.
Nota : Gentileza Diario El Atlantico