ALVARADO : FACUNDO MOYANO
BASTA DE VIOLENCIA
Mar de fondo...
El lío, contra Gimnasia (ER). El lunes, con Unión, en paz
Gustavo Grabia Ggrabia@ole.com.ar
Hubo lío y balazos en el debut del Alvarado de Facundo Moyano, quien sospecha de una operación política. Por eso puso admisión, sumó seguridad y en el clásico hubo paz, aunque sigue alerta por la escalada con el Gobierno.
Facundo Moyano acaba de salir de la reunión entre la CGT que
dirige su padre, Hugo, y la CTA de Pablo Micheli. Es una cumbre del
gremialismo enfrentado al Gobierno. Los movileros esperan su palabra
pero él primero quiere hablar con Olé de lo que pasa en
Alvarado, club que preside hace 40 días. Es que en el debut como local
en el Argentino A, dos facciones de la barra se enfrentaron con armas y
hubo tres heridos, uno de bala. Eso no ocurría hace años. Y Moyano sabe
que nada es casual.
“Un sector pago vino a generar una batalla adrede. Reclutaron gente por los barrios, les dieron asado, los subieron a tres micros y los trajeron a la cancha. Eso no es espontáneo”.
-Dado la pelea de tu viejo con el Gobierno y tu exposición, ¿la movida puede venir por ese lado? -Tengo versiones, pero no pruebas para afirmar quién armó ésto. Sí estoy convencido que no fue por beneficios de la barra, porque les cortamos las entradas. El lío no vino por ahí.
-En la barra hay una facción oficial liderada por el Chileno que dicen que usa ropa del sindicato del peaje, que vos dirigís.
-Mentira. A tal punto que aunque sé que su grupo fue el agredido, le apliqué el derecho de admisión. Y un empleado del club vinculado a él debió renunciar, porque no voy a tolerar la violencia. Vine a pelear contra ella, quiero que la familia vuelva a la cancha. Por eso invertimos en siete cámaras de seguridad, ampliamos el operativo policial un 50% y les pusimos a 18 barras derecho de admisión. Así el lunes contra Unión (MdP) fue una fiesta. Espero que siga así.
-Pero si hay trasfondo político, ¿no tenés miedo de que se vuelvan a provocar incidentes? -Dudas uno siempre tiene y hay que estar alerta. Pero mi compromiso contra la violencia es real.
-¿Conocés al Gato, quien supuestamente armó la batalla en la tribuna? -Yo hice el jardín de infantes en Alvarado, colaboro con el club desde 2003, por lo que conozco a todos. Sé que estuvo afuera, ahora volvió y para mí está bancado por alguien. No sé qué intereses esconden. Pero yo no arreglo con nadie. Tengo claro que los clubes son, para muchos, un botín político. Pero no es mi caso. Ojalá todos los sectores políticos lo entiendan porque este club viene del fondo del mar y estamos haciendo mucho para cambiarle la cara y convertirlo en una institución pujante y social. Y no me van a doblar el brazo, porque ese objetivo, va en serio.
“Un sector pago vino a generar una batalla adrede. Reclutaron gente por los barrios, les dieron asado, los subieron a tres micros y los trajeron a la cancha. Eso no es espontáneo”.
-Dado la pelea de tu viejo con el Gobierno y tu exposición, ¿la movida puede venir por ese lado? -Tengo versiones, pero no pruebas para afirmar quién armó ésto. Sí estoy convencido que no fue por beneficios de la barra, porque les cortamos las entradas. El lío no vino por ahí.
-En la barra hay una facción oficial liderada por el Chileno que dicen que usa ropa del sindicato del peaje, que vos dirigís.
-Mentira. A tal punto que aunque sé que su grupo fue el agredido, le apliqué el derecho de admisión. Y un empleado del club vinculado a él debió renunciar, porque no voy a tolerar la violencia. Vine a pelear contra ella, quiero que la familia vuelva a la cancha. Por eso invertimos en siete cámaras de seguridad, ampliamos el operativo policial un 50% y les pusimos a 18 barras derecho de admisión. Así el lunes contra Unión (MdP) fue una fiesta. Espero que siga así.
-Pero si hay trasfondo político, ¿no tenés miedo de que se vuelvan a provocar incidentes? -Dudas uno siempre tiene y hay que estar alerta. Pero mi compromiso contra la violencia es real.
-¿Conocés al Gato, quien supuestamente armó la batalla en la tribuna? -Yo hice el jardín de infantes en Alvarado, colaboro con el club desde 2003, por lo que conozco a todos. Sé que estuvo afuera, ahora volvió y para mí está bancado por alguien. No sé qué intereses esconden. Pero yo no arreglo con nadie. Tengo claro que los clubes son, para muchos, un botín político. Pero no es mi caso. Ojalá todos los sectores políticos lo entiendan porque este club viene del fondo del mar y estamos haciendo mucho para cambiarle la cara y convertirlo en una institución pujante y social. Y no me van a doblar el brazo, porque ese objetivo, va en serio.
Fuente: Gustavo Grabia Ggrabia@ole.com.ar