CHAMPIONS / BARCELONA 0 - BAYERN MUNICH 3
Palizen parte II
El Barcelona perdió 3-0 y quedó eliminado.
Bayern bailó con un 7-0 global a un Barcelona deslucido, sin
Messi lesionado, y jugará la final de la Champions con el Dortmund, otro
alemán. Si bien el Barsa tiene la Liga ganada, deberá replantearse
cosas tras la categórica caída.
Si buena parte del mundo futbolero
creía que la remontada del Barcelona era posible era porque, además de
representar El paradigma dentro de una cancha, el equipo culé tiene a
Lionel Messi, el mejor del mundo, quien ya había demostrado (como ante
Milan) que era capaz de cargarse en hombros un resultado imposible. Pero
la peor noticia para el Barsa llegó antes de los goles, incluso antes
de que los equipos pisaran el césped del Camp Nou: la Pulga, mal
físicamente, arrancaba en el banco.
En una
cancha atestada, los blaugranas igual quisieron creer, pero se
encontraron con un equipo alemán (ya campeón en su país) aceitado y no
dispuesto a ser partenaire, a pesar del holgado 4-0 de la ida. Piqué
tuvo que ponerse el antiflama para apagar los incendios que prendía
Robben, imparable, por izquierda. Era un vaticinio. El local estuvo
cerca con Pedro y con una volea clarita de Xavi, pero el primero nunca
llegó y la esperanza (¿ciega?) se desvaneció.
En
el arranque del complemento se esperaba el ingreso de Messi como el
último rayo que pudiera alumbrar la remontada. En lugar de eso,
Barcelona se encontró con el golazo del calvo holandés, quien también la
había metido en el baile de Múnich. Y allí, por primera vez en muchos
años, el Barsa se supo derrotado. Con la necesidad de hacer seis en
menos de 45’, hasta la entrada de Leo se tornó innecesaria, ilógica
debido a su lesión. Vilanova incluso empezó a cuidar jugadores...
Y
como el Barsa no sabe jugar por nada, en la letanía que duró hasta el
final del partido llegaron otros dos goles, armados por Ribéry y
definidos por Piqué, en contra, y Müller, que así igualó los ocho goles
que habíamarcado Messi en esta Orejona (el rosarino había sido el
artillero de las últimascuatro ediciones).
Así
como una quimérica remontada contra el Bayern, el mundo del fútbol
esperaba una final de Champions entre Barcelona y Real Madrid, pero
ahora se desayuna con que los mejores de Europa ahora son dos alemanes y
en Wembley, el 25 de mayo, definirán al campeón. Al Barsa, sin colores
en el categórico 7-0 global, le queda pensar en la Liga, ya casi ganada y
en replantearse varias cosas ante esta histórica derrota, en agarrar la
baraja y volver a repartir.