ALVARADO COMIENZA LA PRETEMPORADA
Hugo Tenaglia... Buscamos un ascenso y continuidad de trabajo
Es la voz de la experiencia. Un estudioso del fútbol, respetuoso, con ideas firmes y convincentes. Con 61 años y más de una década como entrenador en el ascenso del fútbol argentino, Hugo Tenaglia es la cabeza del nuevo proyecto de Alvarado, que pretende que esta no sea una temporada más en el Argentino B de fútbol.Esta vez, los directivos de la institución marplatense apostaron por un hombre con un curriculum impecable. Con tres ascensos en la espalda (dos con Huracán de Tres Arroyos y uno en Racing de Olavarría), Tenaglia parece ser la "carta" ganadora de Alvarado. No tiene el "celular de Dios", pero sí una forma de trabajo y una capacidad de liderazgo que lo destaca entre sus pares. "Buscamos un ascenso y continuidad de trabajo", fue una de las cosas que lanzó el reconocido DT en su charla mano a mano con LA CAPITAL.- Si bien usted ya pasó muchas veces por esta situación, me imagino que debe tener muchas expectativas y ganas de iniciar la pretemporada en un nuevo club como Alvarado...- A cada club que uno va y en cada torneo que comienza las expectativas son distintas. Siempre son buenas, porque al principio cada uno piensa en lo suyo, en lo mejor, hacer una buena campaña, tener el mejor plantel. En eso estamos ahora. Creo que vamos bien, encaminados, con ganas de hacer las cosas de la mejor manera. Seguramente hay algunos puntos que arreglar y lo terminaremos de hacer en los últimos días antes de iniciar la parte más dura de la pretemporada. - Es un hombre reconocido en la categoría y tenía muchas propuestas. ¿Qué lo convenció del proyecto de Alvarado?- Para los entrenadores y jugadores, Alvarado siempre "tira". Es una institución grande, otra de las grandes que tiene que estar en una categoría superior. Tiene una hinchada fervorosa y dirigentes que empujan mucho. Entonces uno hace una diferencia con los otros equipos. A veces la intención no es tan ambiciosa, de ascender, de progresar, sino de manejarse con los chicos y estar dentro de la categoría. Acá hay una presión que para mí siempre es buena. Uno viene a ganar y si no lo hace es porque hubo algún defecto originado por lo que nosotros trabajamos. Hay que ser conscientes y responsables porque el objetivo final es ganar y tratar de estar lo más arriba posible. Si uno cumple con los objetivos, la presión no existe. Si no cumplimos, la presión tiene que estar y debe ser manejada de la manera que nosotros sabemos hacerlo.- ¿Qué le faltó a Alvarado en los últimos años para estar en una categoría superior? - Dependió en muchos momentos de la suerte y en otros de la convicción de que se puede. Hay jugadores que en un momento dado se presionan y esto hace que no se centren bien en el convencimiento de ellos, el del grupo y el objetivo a cumplir. Esa es tarea del entrenador. El es quien debe convencerlos de que pueden lograr el objetivo. Si no lo cumplimos es porque se fracasó o porque el destino no quiso que se lograra. A mí me pasó varias veces de jugar finales y no lograr el ascenso, pese a realizar torneos espectaculares. Yo no lo tomo como un fracaso porque durante el torneo se hicieron las cosas bien y dependió pura y exclusivamente de un partido. Otras veces verdaderamente el error es nuestro por no convencer al equipo de lo que tiene que realizar. - ¿Lo sorprendió algo de Alvarado en sus primeros días en la institución? Muchos creen que es un club especial...- Hay varias cosas. Mucha gente dentro de una Subcomisión de fútbol, la Comisión Directiva. Cada cual con su trabajo. No están para hacer números, sino para trabajar para la institución. Es muy grande el esfuerzo que hacen los dirigentes para estar con nosotros y tratar de hacer todo lo mejor posible. Alvarado no tenía la base para arrancar un torneo de esta estirpe con posibilidades de ascender, entonces había que armar un equipo nuevo. Por eso, ellos estuvieron constantemente detrás de uno para ayudar y darnos todas las posibilidades de trabajo. - Lo paradójico es que lo que marca como positivo muchas veces se transforma en negativo. Hablo de las dificultades de aunar los esfuerzos de esa gran cantidad de directivos en un mismo sentido o la presión de la gente cuando no se dan los resultados...- Se vuelve todo en contra, es verdad. Pero esto parte del conocimiento que uno tiene de este trabajo. Uno pasó cosas iguales e intentó lo mismo. Tratamos de progresar, estudiar, ver, mejorar el proyecto cada año. Pero esto no asegura nada. Podés hacer una buena campaña, pero un tiro en el palo, la actuación de un árbitro, del jugador en ese momento, la planificación de uno, hace que el resultado pueda cambiar. La presión y apoyo de toda esa gente que está alrededor se da para un lado o para otro, no hay término medio. - Usted decía que no quedó una base importante de la temporada anterior. ¿El tener que conformar un equipo casi nuevo significa una contra importante?- Los procesos ya no existen, lamentablemente. Tendrían que comenzar de abajo hacia arriba. Se le tendrían que dar más oportunidades a los chicos de divisiones inferiores, de la primera local. Pero no se las damos porque esta calidad humana y deportiva a veces no alcanza para lograr un objetivo. Porque no están capacitados, no tienen el roce suficiente. De eso somos conscientes. Pero cuando nosotros vamos a una institución con la necesidad de alcanzar cosas altas, necesitás jugadores de la categoría, con experiencia. En los clubes que dirigí encontré una pequeña base de jugadores capacitados para lograr un ascenso, entonces tuve que buscar otros futbolistas. También pasa que uno deja cuatro o cinco chicos que después de un año están más capacitados para enfrentar este tipo de torneos. - ¿Cuándo llega al club pide algún tipo de trabajo en las divisiones inferiores o eso es tarea de los directivos de cada institución?- Eso depende pura y exclusivamente de la institución. Nosotros nos asesoramos de algunos chicos de la primera local y los que vemos que tienen posibilidades para un progreso los trabajaremos con nosotros. Si hay menores de las inferiores que también están capacitados de absorber lo que uno puede aplicar y acelerar su proceso de aprendizaje, seguramente los vamos a llevar a trabajar con nosotros. A lo mejor logramos que a fin de año tengamos dos, tres o cuatro jugadores capacitados para estar en un plantel de Argentino. También ellos tienen la posibilidad de demostrarme que están más capacitados que los jugadores que uno trae de otras ciudades. Si lo logran, son ellos los que van a jugar. Yo no me "caso" con ningún jugador y armo el equipo de acuerdo a la calidad de cada futbolista y lo que cada uno rinde dentro del campo de juego. Ojalá pase, y si no sucede, uno no le erró tanto en lo que pronosticó en un principio. No me importa decir que equivoqué con un chico y decir que está más capacitado que el que traje. - Por nombres me imagino que estará conforme con los refuerzos. Tiene jugadores de marca y técnica en el mediocampo y delanteros con gol. ¿Le preocupa no haber terminado de conformar la línea defensiva?- Los jugadores que fuimos buscando los encontramos casi todos. Se nos escaparon dos o tres que me hubiese gustado tener por ciertas virtudes. Pero realmente si no vino uno, llegó otro con características parecidas. Con la defensa arrancamos desde un principio, aparecieron muchos jugadores y nos quedamos con muchos que no vinieron al club, entonces se nos complicó. Como los mediocampistas y delanteros empezaron a aceptar las ofertas, no los dejamos escapar. Entonces, parece que armamos el equipo de adelante para atrás. Ahora nos faltarían algunos centrales, un marcador de punta y un mediocampista central para tener el plantel completo. Lo sacaríamos de la prueba que arrancamos mañana (por hoy) y si no lo logramos ahí los tendríamos que buscar en otro lado. - ¿Tiene un esquema predilecto con el que Alvarado arrancará el torneo? - Sí, seguramente el equipo arrancará con línea de cuatro defensores. Vamos a jugar con "enganche". Eso lo digo hoy. Después todo tiene que funcionar bien. Si el funcionamiento es el que pretendo, seguramente le vamos a insertar dinámica a ese esquema para que los jugadores vayan progresando. Si no me convence, seguramente cambiaremos, pondremos una línea de cuatro mediocampistas con "doble cinco" o tres delanteros.- ¿Le gusta mantener el sistema de local y visitante? - Si hay una variación muy grande en el estudio previo al partido, soy capaz de cambiar. Yo trabajo con línea de tres, cinco mediocampistas, "doble cinco", tres delanteros. Son alternativas. Entonces en el momento de usar una no me va a sorprender. Pero el arranque será 4-3-1-2 si los jugadores responden.- A veces es difícil jugar con enlace en una categoría con pocos jugadores capaces de manejar los tiempos de un equipo. ¿Lo cree factible con los que trajo para ese puesto? Huracán, la página más recordadaHugo Tenaglia escribió muchas historias en el ascenso del fútbol argentino. Pero la página más importante fue la reservada para su querido Huracán de Tres Arroyos, equipo al que llevó de la liga local a la Primera B Nacional de fútbol. Después, Eduardo Anzarda completó la proeza ascendiendo a ese club humilde a la máxima categoría. "Lo que se logró con Huracán es lo que a uno le quedó de los procesos. Teníamos un buen equipo local que hacía seis, siete goles por partido, ganaba casi siempre y salía campeón invicto. Nos propusimos lograr el ascenso en el Argentino B. Teníamos un dirigente, Roberto Bottino, que era muy capaz. Era muy visionario y entendedor del fútbol. Así como jugamos el Argentino B, se cambiaron apenas dos o tres jugadores hasta llegar al Nacional B. Siempre estuvieron los (Claudio) García, los Franklin Martínez, los (Ivan y Marcos) Dragojevich. Un montón. También el 'Bochi' (Miguel) Abad y (Jorge) Izquierdo. Con cuatro, cinco años de trayectoria se logró algo impensado. Yo me voy por cansancio, agotamiento con el plantel. A pesar de dirigir un Nacional B yo quería explorar otras ciudades y provincias. Después llegó (Eduardo) Anzarda a Huracán y con la misma base más tres o cuatro jugadores llegó a primera", contó Tenaglia sobre aquel Huracán que sorprendió a propios y extraños. El entrenador también se refirió a Rodrigo Palacio, jugador al que dirigió en esa institución en la temporada 2002/2003. "El padre, que había jugado al fútbol conmigo, siempre me hablada de él. Ya de chico demostraba sus cualidades. Ese chico pegó un salto tremendo. No había que ser tan estudioso para ver las condiciones que tenía Palacio. Creo que es un ejemplo de que hay que proponerse las cosas. Hay jugadores con muchas condiciones, pero mentalmente no se les da por explotar eso y se dedican a otras cosas. Si esa gente depositara todas sus ganas en beneficio de ser jugador de fútbol, habría chicos que realizarían el mismo camino. Fernando Valderrama es un jugador excelente y depende de él que salte a ser un jugador importante. A pesar de su físico y edad, puede explotar", añadió depositando sus esperanzas en uno de los refuerzos de Alvarado, proveniente de Olimpo de Bahía Blanca. La familia y su profesiónLa vida del entrenador de fútbol en las categorías de ascenso no es sencilla. Los viajes, la falta de continuidad laboral o la necesidad de ser exitoso siempre generan una incertidumbre muy difícil de sobrellevar. Pero para Hugo Tenaglia, el amor al fútbol y a su familia son lo más importante, más allá de todos los imponderables. - ¿Cómo es la vida de un entrenador de ascenso, teniendo en cuenta que es una persona con una familia conformada y sin un lugar fijo en donde vivir, debido a la falta de procesos a largo plazo?- La familia se acostumbra. Mi señora tiene un trabajo fijo en un instituto médico. Ella viene a visitarme acá, en Puerto Madryn o donde trabaje. Cada tanto hacemos un viaje "relámpago". Para nosotros es como estar de novios. Ella está convencida de que esto me hace bien. Si yo estoy en mi casa y estoy mal, ella dice que es peor para el matrimonio. A pesar de estar separados, se conlleva muy bien. La distancia es una de las cosas que más une al matrimonio. Mis dos hijas lo mismo. Ellas trabajan, estudian y viven en La Plata, pero me visitan en las vacaciones.- ¿El amor al fútbol fue heredado por alguien?- No. Siempre fui un apasionado. Mi papá jugó al fútbol pero en forma amateur. De chico me metí a jugar en los barrios. Estuve en divisiones inferiores en Gimnasia y Esgrima La Plata, donde llegué hasta la tercera división. Después jugué en Olavarría, Azul y volví a Tres Arroyos, club en el que gané diez títulos consecutivos. Abandoné el fútbol a los 38 años por cansancio físico en los entrenamientos. No me permitía el lujo de entrenar jueves y viernes e ir a jugar el domingo. Por respeto a los demás tenía que entrenar de martes a sábado y en ese momento ya no podía. - ¿Enseguida inició su carrera como técnico?- Mientras jugaba, ya dirigía una sexta división y después seguí hasta llegar a primera con Huracán. Después dirigí Oriente Fútbol Club y volví a Huracán como ayudante de campo de (Alejandro) Barberón en el Argentino. El renunció y perdimos la categoría. Después dirigí en esa campaña que llegamos desde el fútbol local hasta la Primera B Nacional. Después pasé por muchos clubes hasta llegar a Alvarado.Primeros movimientos y pruebas Alvarado arrancará hoy la pretemporada con un entrenamiento liviano para los refuerzos confirmados y también iniciará un período de pruebas de jugadores para terminar de conformar el plantel que competirá en el Argentino B de fútbol.El plantel se juntará a las 14.30 en un complejo deportivo de la calle Luro, para luego trasladarse al Parque Camet para comenzar con los primeros trabajos. Por su parte, las pruebas -que se extenderán hasta el viernes- serán a partir de las 9 en el predio de Peñarol de esta ciudad. Probablemente, entre 20 y 25 futbolistas se presenten a la misma, y entre ellos estará el lateral izquierdo Cristian Castagnino, de último paso por Unión en el Argentino A. Además, serán evaluados jugadores libres provenientes de Tigre y Huracán, un futbolista paraguayo, otro de Comodoro Rivadavia y aquellos que se desempeñan en el fútbol local.
Por Juan Manuel Alvarez
Es la voz de la experiencia. Un estudioso del fútbol, respetuoso, con ideas firmes y convincentes. Con 61 años y más de una década como entrenador en el ascenso del fútbol argentino, Hugo Tenaglia es la cabeza del nuevo proyecto de Alvarado, que pretende que esta no sea una temporada más en el Argentino B de fútbol.Esta vez, los directivos de la institución marplatense apostaron por un hombre con un curriculum impecable. Con tres ascensos en la espalda (dos con Huracán de Tres Arroyos y uno en Racing de Olavarría), Tenaglia parece ser la "carta" ganadora de Alvarado. No tiene el "celular de Dios", pero sí una forma de trabajo y una capacidad de liderazgo que lo destaca entre sus pares. "Buscamos un ascenso y continuidad de trabajo", fue una de las cosas que lanzó el reconocido DT en su charla mano a mano con LA CAPITAL.- Si bien usted ya pasó muchas veces por esta situación, me imagino que debe tener muchas expectativas y ganas de iniciar la pretemporada en un nuevo club como Alvarado...- A cada club que uno va y en cada torneo que comienza las expectativas son distintas. Siempre son buenas, porque al principio cada uno piensa en lo suyo, en lo mejor, hacer una buena campaña, tener el mejor plantel. En eso estamos ahora. Creo que vamos bien, encaminados, con ganas de hacer las cosas de la mejor manera. Seguramente hay algunos puntos que arreglar y lo terminaremos de hacer en los últimos días antes de iniciar la parte más dura de la pretemporada. - Es un hombre reconocido en la categoría y tenía muchas propuestas. ¿Qué lo convenció del proyecto de Alvarado?- Para los entrenadores y jugadores, Alvarado siempre "tira". Es una institución grande, otra de las grandes que tiene que estar en una categoría superior. Tiene una hinchada fervorosa y dirigentes que empujan mucho. Entonces uno hace una diferencia con los otros equipos. A veces la intención no es tan ambiciosa, de ascender, de progresar, sino de manejarse con los chicos y estar dentro de la categoría. Acá hay una presión que para mí siempre es buena. Uno viene a ganar y si no lo hace es porque hubo algún defecto originado por lo que nosotros trabajamos. Hay que ser conscientes y responsables porque el objetivo final es ganar y tratar de estar lo más arriba posible. Si uno cumple con los objetivos, la presión no existe. Si no cumplimos, la presión tiene que estar y debe ser manejada de la manera que nosotros sabemos hacerlo.- ¿Qué le faltó a Alvarado en los últimos años para estar en una categoría superior? - Dependió en muchos momentos de la suerte y en otros de la convicción de que se puede. Hay jugadores que en un momento dado se presionan y esto hace que no se centren bien en el convencimiento de ellos, el del grupo y el objetivo a cumplir. Esa es tarea del entrenador. El es quien debe convencerlos de que pueden lograr el objetivo. Si no lo cumplimos es porque se fracasó o porque el destino no quiso que se lograra. A mí me pasó varias veces de jugar finales y no lograr el ascenso, pese a realizar torneos espectaculares. Yo no lo tomo como un fracaso porque durante el torneo se hicieron las cosas bien y dependió pura y exclusivamente de un partido. Otras veces verdaderamente el error es nuestro por no convencer al equipo de lo que tiene que realizar. - ¿Lo sorprendió algo de Alvarado en sus primeros días en la institución? Muchos creen que es un club especial...- Hay varias cosas. Mucha gente dentro de una Subcomisión de fútbol, la Comisión Directiva. Cada cual con su trabajo. No están para hacer números, sino para trabajar para la institución. Es muy grande el esfuerzo que hacen los dirigentes para estar con nosotros y tratar de hacer todo lo mejor posible. Alvarado no tenía la base para arrancar un torneo de esta estirpe con posibilidades de ascender, entonces había que armar un equipo nuevo. Por eso, ellos estuvieron constantemente detrás de uno para ayudar y darnos todas las posibilidades de trabajo. - Lo paradójico es que lo que marca como positivo muchas veces se transforma en negativo. Hablo de las dificultades de aunar los esfuerzos de esa gran cantidad de directivos en un mismo sentido o la presión de la gente cuando no se dan los resultados...- Se vuelve todo en contra, es verdad. Pero esto parte del conocimiento que uno tiene de este trabajo. Uno pasó cosas iguales e intentó lo mismo. Tratamos de progresar, estudiar, ver, mejorar el proyecto cada año. Pero esto no asegura nada. Podés hacer una buena campaña, pero un tiro en el palo, la actuación de un árbitro, del jugador en ese momento, la planificación de uno, hace que el resultado pueda cambiar. La presión y apoyo de toda esa gente que está alrededor se da para un lado o para otro, no hay término medio. - Usted decía que no quedó una base importante de la temporada anterior. ¿El tener que conformar un equipo casi nuevo significa una contra importante?- Los procesos ya no existen, lamentablemente. Tendrían que comenzar de abajo hacia arriba. Se le tendrían que dar más oportunidades a los chicos de divisiones inferiores, de la primera local. Pero no se las damos porque esta calidad humana y deportiva a veces no alcanza para lograr un objetivo. Porque no están capacitados, no tienen el roce suficiente. De eso somos conscientes. Pero cuando nosotros vamos a una institución con la necesidad de alcanzar cosas altas, necesitás jugadores de la categoría, con experiencia. En los clubes que dirigí encontré una pequeña base de jugadores capacitados para lograr un ascenso, entonces tuve que buscar otros futbolistas. También pasa que uno deja cuatro o cinco chicos que después de un año están más capacitados para enfrentar este tipo de torneos. - ¿Cuándo llega al club pide algún tipo de trabajo en las divisiones inferiores o eso es tarea de los directivos de cada institución?- Eso depende pura y exclusivamente de la institución. Nosotros nos asesoramos de algunos chicos de la primera local y los que vemos que tienen posibilidades para un progreso los trabajaremos con nosotros. Si hay menores de las inferiores que también están capacitados de absorber lo que uno puede aplicar y acelerar su proceso de aprendizaje, seguramente los vamos a llevar a trabajar con nosotros. A lo mejor logramos que a fin de año tengamos dos, tres o cuatro jugadores capacitados para estar en un plantel de Argentino. También ellos tienen la posibilidad de demostrarme que están más capacitados que los jugadores que uno trae de otras ciudades. Si lo logran, son ellos los que van a jugar. Yo no me "caso" con ningún jugador y armo el equipo de acuerdo a la calidad de cada futbolista y lo que cada uno rinde dentro del campo de juego. Ojalá pase, y si no sucede, uno no le erró tanto en lo que pronosticó en un principio. No me importa decir que equivoqué con un chico y decir que está más capacitado que el que traje. - Por nombres me imagino que estará conforme con los refuerzos. Tiene jugadores de marca y técnica en el mediocampo y delanteros con gol. ¿Le preocupa no haber terminado de conformar la línea defensiva?- Los jugadores que fuimos buscando los encontramos casi todos. Se nos escaparon dos o tres que me hubiese gustado tener por ciertas virtudes. Pero realmente si no vino uno, llegó otro con características parecidas. Con la defensa arrancamos desde un principio, aparecieron muchos jugadores y nos quedamos con muchos que no vinieron al club, entonces se nos complicó. Como los mediocampistas y delanteros empezaron a aceptar las ofertas, no los dejamos escapar. Entonces, parece que armamos el equipo de adelante para atrás. Ahora nos faltarían algunos centrales, un marcador de punta y un mediocampista central para tener el plantel completo. Lo sacaríamos de la prueba que arrancamos mañana (por hoy) y si no lo logramos ahí los tendríamos que buscar en otro lado. - ¿Tiene un esquema predilecto con el que Alvarado arrancará el torneo? - Sí, seguramente el equipo arrancará con línea de cuatro defensores. Vamos a jugar con "enganche". Eso lo digo hoy. Después todo tiene que funcionar bien. Si el funcionamiento es el que pretendo, seguramente le vamos a insertar dinámica a ese esquema para que los jugadores vayan progresando. Si no me convence, seguramente cambiaremos, pondremos una línea de cuatro mediocampistas con "doble cinco" o tres delanteros.- ¿Le gusta mantener el sistema de local y visitante? - Si hay una variación muy grande en el estudio previo al partido, soy capaz de cambiar. Yo trabajo con línea de tres, cinco mediocampistas, "doble cinco", tres delanteros. Son alternativas. Entonces en el momento de usar una no me va a sorprender. Pero el arranque será 4-3-1-2 si los jugadores responden.- A veces es difícil jugar con enlace en una categoría con pocos jugadores capaces de manejar los tiempos de un equipo. ¿Lo cree factible con los que trajo para ese puesto? Huracán, la página más recordadaHugo Tenaglia escribió muchas historias en el ascenso del fútbol argentino. Pero la página más importante fue la reservada para su querido Huracán de Tres Arroyos, equipo al que llevó de la liga local a la Primera B Nacional de fútbol. Después, Eduardo Anzarda completó la proeza ascendiendo a ese club humilde a la máxima categoría. "Lo que se logró con Huracán es lo que a uno le quedó de los procesos. Teníamos un buen equipo local que hacía seis, siete goles por partido, ganaba casi siempre y salía campeón invicto. Nos propusimos lograr el ascenso en el Argentino B. Teníamos un dirigente, Roberto Bottino, que era muy capaz. Era muy visionario y entendedor del fútbol. Así como jugamos el Argentino B, se cambiaron apenas dos o tres jugadores hasta llegar al Nacional B. Siempre estuvieron los (Claudio) García, los Franklin Martínez, los (Ivan y Marcos) Dragojevich. Un montón. También el 'Bochi' (Miguel) Abad y (Jorge) Izquierdo. Con cuatro, cinco años de trayectoria se logró algo impensado. Yo me voy por cansancio, agotamiento con el plantel. A pesar de dirigir un Nacional B yo quería explorar otras ciudades y provincias. Después llegó (Eduardo) Anzarda a Huracán y con la misma base más tres o cuatro jugadores llegó a primera", contó Tenaglia sobre aquel Huracán que sorprendió a propios y extraños. El entrenador también se refirió a Rodrigo Palacio, jugador al que dirigió en esa institución en la temporada 2002/2003. "El padre, que había jugado al fútbol conmigo, siempre me hablada de él. Ya de chico demostraba sus cualidades. Ese chico pegó un salto tremendo. No había que ser tan estudioso para ver las condiciones que tenía Palacio. Creo que es un ejemplo de que hay que proponerse las cosas. Hay jugadores con muchas condiciones, pero mentalmente no se les da por explotar eso y se dedican a otras cosas. Si esa gente depositara todas sus ganas en beneficio de ser jugador de fútbol, habría chicos que realizarían el mismo camino. Fernando Valderrama es un jugador excelente y depende de él que salte a ser un jugador importante. A pesar de su físico y edad, puede explotar", añadió depositando sus esperanzas en uno de los refuerzos de Alvarado, proveniente de Olimpo de Bahía Blanca. La familia y su profesiónLa vida del entrenador de fútbol en las categorías de ascenso no es sencilla. Los viajes, la falta de continuidad laboral o la necesidad de ser exitoso siempre generan una incertidumbre muy difícil de sobrellevar. Pero para Hugo Tenaglia, el amor al fútbol y a su familia son lo más importante, más allá de todos los imponderables. - ¿Cómo es la vida de un entrenador de ascenso, teniendo en cuenta que es una persona con una familia conformada y sin un lugar fijo en donde vivir, debido a la falta de procesos a largo plazo?- La familia se acostumbra. Mi señora tiene un trabajo fijo en un instituto médico. Ella viene a visitarme acá, en Puerto Madryn o donde trabaje. Cada tanto hacemos un viaje "relámpago". Para nosotros es como estar de novios. Ella está convencida de que esto me hace bien. Si yo estoy en mi casa y estoy mal, ella dice que es peor para el matrimonio. A pesar de estar separados, se conlleva muy bien. La distancia es una de las cosas que más une al matrimonio. Mis dos hijas lo mismo. Ellas trabajan, estudian y viven en La Plata, pero me visitan en las vacaciones.- ¿El amor al fútbol fue heredado por alguien?- No. Siempre fui un apasionado. Mi papá jugó al fútbol pero en forma amateur. De chico me metí a jugar en los barrios. Estuve en divisiones inferiores en Gimnasia y Esgrima La Plata, donde llegué hasta la tercera división. Después jugué en Olavarría, Azul y volví a Tres Arroyos, club en el que gané diez títulos consecutivos. Abandoné el fútbol a los 38 años por cansancio físico en los entrenamientos. No me permitía el lujo de entrenar jueves y viernes e ir a jugar el domingo. Por respeto a los demás tenía que entrenar de martes a sábado y en ese momento ya no podía. - ¿Enseguida inició su carrera como técnico?- Mientras jugaba, ya dirigía una sexta división y después seguí hasta llegar a primera con Huracán. Después dirigí Oriente Fútbol Club y volví a Huracán como ayudante de campo de (Alejandro) Barberón en el Argentino. El renunció y perdimos la categoría. Después dirigí en esa campaña que llegamos desde el fútbol local hasta la Primera B Nacional. Después pasé por muchos clubes hasta llegar a Alvarado.Primeros movimientos y pruebas Alvarado arrancará hoy la pretemporada con un entrenamiento liviano para los refuerzos confirmados y también iniciará un período de pruebas de jugadores para terminar de conformar el plantel que competirá en el Argentino B de fútbol.El plantel se juntará a las 14.30 en un complejo deportivo de la calle Luro, para luego trasladarse al Parque Camet para comenzar con los primeros trabajos. Por su parte, las pruebas -que se extenderán hasta el viernes- serán a partir de las 9 en el predio de Peñarol de esta ciudad. Probablemente, entre 20 y 25 futbolistas se presenten a la misma, y entre ellos estará el lateral izquierdo Cristian Castagnino, de último paso por Unión en el Argentino A. Además, serán evaluados jugadores libres provenientes de Tigre y Huracán, un futbolista paraguayo, otro de Comodoro Rivadavia y aquellos que se desempeñan en el fútbol local.Por Juan Manuel Alvarez
